UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE SINALOA
FACULTAD CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
LEM-ESPAÑOL
TEORÍAS PEDAGÓGICAS
CLÁSICAS
“RESEÑA PARA SIEMPRE
PESTALOZZI”
ALUMNA:
Montes
Domínguez Araceli Lorena
PROFESORA:
Valeria Geraldine Gallegos Rojas
MAZATLÁN, SINALOA ABRIL
2021
Pestalozzi nació en Zúrich (Suiza) en 1746 y murió en
1827, estudió primaria en una
escuela pública, secundaria
en la escuela
de latín y
finalmente continuó sus estudios
de Humanidades en
el Collegium humanitatis,
donde no concluyó sus estudios de
teología y jurisprudencia. A su corta edad de 6 años fallece su padre, con lo
cual, se cree que esto influyó mucho en la relevancia de su pedagogía familiar
y el amor maternal como modelo de la moral. Pestalozzi es
considerado por la
mayoría de los
tratadistas como el
padre de la pedagogía
popular moderna, preferentemente por
su acción social
al servicio de la
infancia (Almeida, 2017).
Johann Heinrich
Pestalozzi es conocido como el autor y defensor del famoso eslogan “cabeza,
corazón y mano”. Este aforismo implica la visión de un desarrollo holístico de
todas las capacidades humanas innatas, esto es, de las habilidades
intelectuales, religioso-emocionales y físicas de un ser humano (Horlacher,
2019).
Pestalozzi lo que
trató fue poder introducir a los niños a una educación libre, pero de una forma
en la que él consideraba que no se perdiera su naturaleza, pues para él, esto
era fundamental, pues menciona que no es un método lo que él sigue, que de
hecho, el aprendizaje no empieza con el ABC pero los niños necesitan aprender a
hablar naturalmente primero, que sus ideas crezcan naturalmente y en libertad,
no que sea por castigos u órdenes, claro que con libertad respetuosa. La
confianza es fundamental en los niños y también en nosotros mismos, pero esto
no quiere decir que los dejemos hacer lo que quieran de cualquier forma, claro
que hay que hacerles saber las consecuencias de sus actos pero de tal forma que
tengan efecto en el niño, un efecto positivo en su desarrollo, en su formación,
que el niño se convierta en un hombre que se sepa valer por sí mismo. Una frase
muy marcada que el menciona en la película es que su única política es la de
transformar a las personas en seres humanos. En este último punto de su frase,
entendí que se refiere a que los hombres por así llamarnos a todos, ya estamos
modificados de pensamiento por el estatuto social, ya estamos como manchados
entre nosotros mismos por maldad (un decir), pues para Pestalozzi el hombre es
bueno por naturaleza, sin embargo, es modificado al crecer por su mismo entorno
y educación, y si alguna vez intentó ser bueno y le fue mal, se vuelve malo
(por así decirlo). En la película se pudo notar como el no veía bien la
violencia, el cómo los adultos querían imponer sus reglas que para ellos era
respeto, por medio de maltratos o golpes, Pestalozzi los defendía y al hacerlo
les aclaraba a los adultos el que no debían hacerlo y el porqué, en sí, ahí no
solo educaba niños, parecía que también adultos. Un diálogo que menciona fue
que no se le debe de pegar a un niño si está sonriendo.
Por otro lado, eso no
quería decir que los niños podían ser malcriados, pues se notó que era una
persona exigente con sus alumnos, esto nos muestra que como educadores se
necesita tener paciencia, no perder la cordura y mucho menos el respeto tanto
para el alumno como para uno mismo, tratar de promover el orden, la obediencia,
serenidad y sobre todo la libertad. Si algo también nos demostró Pestalozzi, es
el amor hacia ellos, el cómo no se dio por vencido a pesar de los fracasos que
tenía y de cómo se estaba yendo a la ruina, agotando los recursos que se le
brindaban, aun así, el seguía viendo por los huérfanos, porque estuvieran bien,
y porque tuvieran la oportunidad que muchos no tenían por ser pobres igual que
ellos.
Si hablamos de
nuestro caso, si tiene relación todo, el cómo Pestalozzi educaba con respeto y
cariño a los niños y después ellos mismos lo obedecían sin necesidad de que les
levantara la voz, pues todos recordamos a
los profesores o profesoras que mejor han hecho su trabajo, que en
realidad si les importaba que aprendiéramos, que nos superáramos, claro que
todo educador tiene esa finalidad, la de ser un guía, pero siempre recordamos
de mejor manera al profesor (a) que con respeto y cariño nos trató, nos enseñó,
y marcó un camino en nuestros recuerdos.
BIBLIOGRAFÍA
Almeida, A. (2017).
El Guiniguada: Revista de investigaciones y experiencias en Ciencias de la
Educación; Johann Heinrinch Pestalozzi (1746-1827): biografía literaria y
epistolar. Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. PP. 18-25. Consultado del
sitio web: (PDF) Johann Heinrich
Pestalozzi (1746-1827): biografía literaria y epistolar (researchgate.net)
Horlacher, R. (2019).
Educación vocacional y liberal en la teoría de la educación de Pestalozzi
(Trad. G. Parra). Pedagogía y Saberes, 50, 121–132. Consultado del sitio web: 0121-2494-pys-50-121.pdf
(scielo.org.co)
No hay comentarios:
Publicar un comentario